Aleluya
Última noche en mi bosque. He visto al menos una decena de ciervos, jóvenes todos. No salieron corriendo al verme, como si supieran que necesitaba fijarlos en mis ojos más hondos, para guardar su reflejo y llevarlo conmigo como un puñado de ángeles a los que agradecer en momentos sagrados o a los que invocar […]